Este perfume irradia una energía fuerte y poderosa, que evoca sentimientos de lujuria y deseo. La perla radiante que descansa entre los seductores labios simboliza la sensualidad y la pasión por despertar los sentidos y cautivar a quienes te rodean. "Para esta fragancia, Charlotte Tilbury quería crear algo sensual, ardiente y sexy con facetas animales y almizcladas.